viernes, 12 de septiembre de 2014

El ISI esa amenaza creciente.

Desde hacer algunos meses hemos estado asistiendo a la construcción de un estado totalitario terrorista definido como estado islámico o califato islámico. Esa ofensiva terrorista para hacerse con porciones considerable de la nación Siria (en pleno proceso revolucionario) e Irak ha propiciado un régimen de terror que el mundo no había visto desde la edad media. Este proceso revolucionario del Islamo-fascismo se ha acrecentado con la toma de la gran ciudad de Mosul provocando una huida y genocidio sin precedente en la historia de oriente medios. Dicho genocidio ha ido contra toda las minorías religiosas, chií y a los sunnís demócratas que se niega acepta ese estado totalitario. ¿Cuál ha sido la respuesta de occidente? Tibieza, más preocupado en hacer frente a las ansia expansionista Rusia y más preocupado sobre el sexos de los ángeles económicos. Lógicamente la comunidad musulmana en España e incluso en el norte de África ha sabido reaccionar más rápidamente, Marruecos intensifica su lucha contra el terrorismo, y los propios musulmanes españoles exigen a los imanes que condenen la violencia de ISI y aboguen por alejar a los jóvenes de ese extremismo religioso que llevan a la muerte y confrontación entre seres humanos iguales pero con diversidad de creencias. La única respuesta contundente ha sido la premier británico, que ha explicado la necesidad de “secuestrar” el pasaporte a los combatientes británicos de la yihad. ¿Copiara el gobierno español la medida británica?? Viendo las actuación del gobiernos conservador español, posiblemente la respuesta será no. Desde mi humilde punto de vista hay que colaborar con la comunidad musulmanas españolas para excluir esos elemento radicales de sus propias filas y a la vez aislar y ahogar económicamente ( y policialmente) a cualquier organización que justifique la yihad, unido a que cualquier ciudadanos español sea nacionalizado o nacido en España se vaya a lucha en la yihad de Isis, se le debe retirar el pasaporte y no permitir la entrada en territorio español por colaboración con un estado de factor que ha vulnerado los DDHH y ha realizado crímenes contra la humanidad. No a la islamofobia no al pasotismo, porque no hay que olvidar que el pasotismo de las potencias demócrata condujo a la II Gran Guerra.